29 de septiembre de 1996. Zaragoza-Barcelona. Córner a favor de los visitantes y lío monumental. Couto da una patada a Aguado y Solana le da un manotazo que el portugués exagera descaramente. El colegiado del encuentro, Mejuto González, acude a su línea, Rafa Guerrero, para que le saque de dudas.
El asistente, lo ha visto perfectamente... o eso parece. "Penalti y expulsión", dice sin vacilar. El colegiado insiste. "Vaya, joder Rafa, me cago en mi madre, ¿expulsión de quién?". Y es que dijo eso. Jamás dijo "¡Rafa, no me jodas!", tal y como se recuerda dicho suceso.
Pero parecía que Rafa no lo había visto tan bien. Sólo vio la acción sobre el futbolista del Barcelona y, además, se equivocó de agresor. Tenía que salir del campo "el número 6", que era Aguado y no Solana, que fue el que vio la roja. El conjunto 'culé' perdía el encuentro por 3-2 y acabó ganando 3-5.