El Rayo está a un punto de los puestos de promoción, de los que salió en la jornada 14, y con un partido menos por el aplazamiento del duelo contra el Albacete espera seguir escalando posiciones en la clasificación las siguientes semanas.
El buen momento que vive el Rayo se traduce en 18 puntos sumados de los últimos 30, pero sobre todo en la firmeza defensiva que está mostrando como equipo que menos pierde de la categoría (cinco partidos) y cuarto que menos encaja (28 goles) del campeonato.
La última derrota que sufrió el Rayo fue el 1 de diciembre de 2019 frente al Oviedo, cuando cayó en el Carlos Tartiere por 2-1.
"Después de todo lo malo que nos ha pasado, porque nos ha pasado todo a nosotros, estar donde estamos es para valorar. Somos competitivos, nos recuperamos de todos los golpes y tener que levantarse todas las semanas con alguna cosa que no ayuda, lesiones o situaciones extradeportivas, nos ha llevado a trabajar en situaciones de todo tipo, pero vamos a estar ahí", dijo hace unos días Paco Jémez.
Con 39 puntos, a uno de la sexta plaza que marca el Elche, pero con un partido menos, el Rayo no tiene mucho margen de error si quiere acabar la temporada entre los seis primeros de la tabla.
Por delante siete partidos en casa (Elche, Albacete, Fuenlabrada, Sporting, Málaga, Numancia y Las Palmas) y otros siete de visitante (Albacete, Cádiz, Deportivo, Alcorcón, Zaragoza, Almería y Racing) que marcarán el final de temporada.