Y no, no es por capricho. Al parecer, los 'merengues' temen que el delantero internacional galés vuelva a lesionarse, ahora que parece que vuelve a tener ritmo con los blancos.
Según informa hoy 'The Sun', el Real Madrid habría prohibido a Bale, desde hace ya bastante tiempo, poder jugar al fútbol en la casa que posee en Gales, una vivienda que cuenta con casi cinco hectáreas de terreno.
Esta prohibición 'merengue' se debe a que el seguro contratado por el club madridista no cubre una hipotética lesión de Gareth en su vivienda galesa.
El mismo medio añade unas declaraciones de un amigo cercano a la familia del galés, en las que asegura que Bale estaba deseando tener un campo de fútbol en su propia casa para poder jugar libremente siempre que quisiera.
"Después de mudarse, reunió a algunos amigos para jugar un partido cinco contra cinco, pero ahora ya no puede. Su club lo quiere tener entre algodones y pienso que tienen miedo de que el campo no esté del todo bien y Bale vuelva a lesionarse el tobillo", comentó dicha fuente.
"Pero el campo está bien cuidado: contrató a un jardinero expecialista en estadios deportivos para construirlo", añadió.
¿Qué te parece esta curiosa prohibición 'merengue'?