En un comunicado, el club del Baix Camp se reafirma en la defensa del caso y se alegra al ver que finalmente "se haya impuesto la cordura, aunque sea un mes y medio después de los hechos".
El club se alegra por que el Comité de Competición les ha trasladado que mostrar una bandera o gritar 'Independencia' no puede ser "constitutivo de una conducta violenta, racista, xenófoba o intolerante".