35 minutos le bastaron al Schalke para liquidar el encuentro ante un Augsburgo que desperdició un penalti en la primera mitad y con el 2-0 en el marcador.
Los locales se permitieron el lujo de reservar jugadores para el duelo de vuelta de los octavos de final de la Europa League de esta semana.
Burgstaller, con otro doblete, y Caligiuri se bastaron para reventar el partido en una primera media hora majestuosa, con la ayuda de Fahrmann, que detuvo todo lo que llegó a su área.