De Gea no vistió de blanco porque los datos de la operación se introdujeron tarde en el TMS de la FIFA y la operación se fue al traste.
El TMS es el istema de Correlación de Transferencias puesto en práctica por FIFA el 1 de octubre del 2010 con el objetivo de acabar con los antiguos faxes. Es una herramienta virtual que permiten a los clubes llevar a cabo transferencias de jugadores de forma electrónica.
Su objetivo es lograr una mayor transparencia de todas las operaciones de jugadores, además de poder obtener muchos más datos como los futbolistas implicados, sumas de las transferencias, intermediarios...
La FIFA decidió el pasado 31 de octubre, como comunicó, que el fútbol femenino también se rija por este sistema. A partir del 1 de enero del 2018 todas las operaciones internacionales entre clubes que impliquen el traspaso de jugadoras deberán quedar inscritas en el TMS.
La FIFA ha establecido un periodo de prueba desde el próximo 7 de noviembre y hasta el 31 de diciembre para que los clubes se familiriacen con el sistema.
En los artículos pertenecientes a la transferencia de futbolistas se añadirán unos anexos en la que es incorporará la figura de las jugadoras a un texto en el que, hasta el momento, sólo se habla de fútbol masculino.