"Cuando me dijeron que tenía la oportunidad de ir al Groningen lo primero que hice fue mirar en la PlayStation dónde estaba ese equipo y qué camiseta llevaba. Fue un paso grande para estar más cerca de ella, que vivía en Barcelona", desveló el '9' azulgrana.
A Suárez le preguntaron por qué es tan difícil ser Messi. "Porque nunca sabes los intereses que puede tener la gente a tu alrededor. Me pasa a mí también. Es difícil tener una relación y llevarla con un compañero. Con Leo desde el principio hubo un afecto mutuo", respondió.
Por otro lado, el delantero ha dejado a un lado su afición a las videoconsolas: "Muy poco. Cuando puedo en las concentraciones sí juego alguna vez, pero en casa con los niños eso ya se acabó. Suelo cambiar de equipo a menudo. Busco divertirme con los compañeros y también en casa cuando juego".
También habló de su hijo Benja. "Me sorprende cómo presta atención a las cosas del fútbol. Está mirando partidos y sale festejando un gol como lo hace Griezmann o como Leo. También alguna vez como Dybala. Esto sucede porque retiene cada detalle", reveló.
Aunque no le hace mucha gracia que juegue de portero. "Espero que no. Bueno, eso lo decidirá él. Todavía no entiende bien las cosas y lo que hace es por divertirse. No haré nada para evitarlo, lo que él quiera. Fíjese que cuando era pequeño yo nunca le incité a jugar al fútbol", dijo por último.