El Chelsea acumuló una nueva derrota en la Premier League y deja muy tocado a José Mourinho. En condiciones similares, el entrenador luso renunció al puesto de entrenador en 2007.
El Southampton jugó un partido muy serio en Stamford Bridge y pudo conseguir una goleada de escándalo si su delantero, Mané, hubiera estado más acertado ante Begovic.
Con todo, los 'blues' comenzaron adelantándose en el marcador gracias a un espectacular lanzamiento de falta de Willian, pero Koeman le ganó totalmente la partida a Mourinho. Al filo del descanso, Davis hizo justicia y aprovechó una fantástica dejada con el pecho de Pellè para empatar el partido.
La segunda parte fue un paseo del Southampton. Pese a perdonar en dos ocasiones, Mané finalmente logró adelantar a los suyos en el 60. Un excelente contrataque culminado por Pellè sentenció el choque en el 72 y los visitantes pudieron incluso aumentar la diferencia ante un Chelsea lento, soso y sin hambre de triunfo.
La nefasta imagen dada por el Chelsea podría conllevar cambios muy pronto en el equipo londinense. Las miradas apuntan a un José Mourinho que se mostró triste y abatido en el banquillo, sin capacidad de reacción.