Hoy, día de su 21 cumpleaños, el futbolista ha confirmado todos los buenos augurios y se ha convertido en uno de los descubrimientos de Guardiola esta temporada. El de Santpedor lo ha hecho jugar en cinco posiciones diferentes y en todas lo ha hecho bien, dejando boquiabierta a la hinchada del equipo bávaro con su espectacular actuación -como central- ante el Bayer de Chicharito y Kiessling el último fin de semana.
No es otro que Joshua Kimmich, proyecto de todocampista alemán que ya es toda una realidad. Empleado casi siempre como sustituto de Xabi Alonso -debutó en Copa ante el Nottingen y en Bundesliga ante el Darmstadt en esa posición-, Kimmich ha convencido a Pep gracias a sus atributos y su sentido táctico.
Sólo un prodigio como él puede ser capaz de jugar con únicamente 21 años en demarcaciones tan diversas como la de central, pivote, lateral o extremo. Formado en las inferiores del Stuttgart, fue cedido al Red Bull Leipzig, con el que logró ascender a la 1. Liga siendo un jugador clave.
Apenas tenía 18 años y los ojeadores del Bayern rápidamente se lanzaron a su contratación, más aún cuando la pasada campaña se salió en un 0-3 con el equipo de Leipzig al Múnich 1860. Los 7 millones de euros desembolsados por él parecían excesivos en un principio, pero con el tiempo se han quedado incluso escasos ante el potencial de un jugador que no tiene techo.
Las bajas le han dado cierta cancha a la hora de participar este año, pero sus partidazos le convertirán con toda seguirdad en un básico de Ancelotti para el próximo año. Su primer gran partido llegó en el 5-0 ante el Dinamo de Zagreb -"tarde o temprano será internacional", dijo Guardiola-, pero desde entonces no ha hecho nada más que bordarlo en todos los partidos que ha jugado.
"Tiene todo lo que un jugador necesita: es inteligente, agresivo, posee buen cambio de ritmo, va bien de cabeza, tiene visión de juego, percibe bien el espacio libre… Es un jugador increíble", dijo el técnico de Santpedor tras su estreno en Champions. "Merece más minutos pero no se queja. Es una locura en cada entrenamiento, lo fue ante el Dinamo y lo ha sido hoy", incidió el propio Pep tras un 4-0 al Stuttgart.
Un futbolista diez por el que en un puñado de años se peleará media Europa.