Tarde plácida en Valencia. De las que ya se echaban de menos o de las que, más bien, hacían falta. El equipo de Gennaro Gattuso logró llevarse la victoria en un partido en el que dominó al Celta y consiguió hacer bailar a su gente de una vez por todas esta temporada.
El conjunto 'che' tuvo la posesión de más de un 60% y también fue mejor en la producción ofensiva, pues en la defensa se vio a un equipo sólido que se mantuvo fuerte y que solo dejó en dos los tiros entre los tres palos del Celta.
Un gol de Samu Castillejo al aprovechar un rechace de Marchesín tras una buena penetración de Samu Lino, puso este sábado por delante al Valencia ante el Celta al descanso de un primer tiempo nivelado.
En el minuto tres, el Celta reclamó un penalti por derribo a Larsen, y en el 23, Diakhaby mandó un balón al palo en la salida de un córner. Fueron las dos acciones más relevantes previas al gol de Castillejo. Aspas también lo intentó y probó suerte con un disparo de libre directo a un palo con el que puso en aprietos a un rápido Mamardashvili.
El Celta presionó mucho la salida de balón del Valencia, que apenas encontró espacios para llegar a la meta visitante, aunque fue capaz de aprovechar una de las pocas ocasiones de que dispuso.
El Valencia explotó en la recta final
En la segunda mitad pasó casi de todo. Hubo más tensión y más temperatura. Se la jugó el Celta adelantando las líneas para buscar el empate y eso lo logró aprovechar un rápido Valencia.
A los 55 minutos, Samuel Lino quiso ser el más listo de la clase, pero no consiguió engañar al árbitro, que además está asistido por la tecnología. El del Valencia se lanzó en el área, aunque lo tocaron después, pero ya estaba en caída y se llevó la amonestación por piscinazo.
No demasiado después, a los cinco minutos, fue Cervi el que vio la roja porque hizo una entrada desproporcionada a Thierry Correia al golpear su espinilla con la planta. El colegiado tampoco dudó y lo mandó a los vestuarios.
Con uno menos pudo hacer algo el Celta, que lo intentó todo y Larsen tuvo en sus botas el empate de no ser por otra gran estirada de Mamardashvili, que voló y le negó el premio al equipo gallego.
En una contra fulgurante, Marcos André aprovechó el rebote de un pase en largo a Gayà y fusiló al meta Marchesín con un disparo cruzado y abajo. Para redondear la tarde, ya en el añadido, Almeida se estrenó con la camiseta del Valencia con otro fuerte disparo arriba con la diestra ante el que no pudo hacer nada Marchesín. Sábado de sonrisas en Mestalla.