El Valencia madrugó para cerrar sus dos únicos fichajes

Cuando al entrenador, Marcelino García Toral, se le preguntó en diciembre sobre las posibles incorporaciones a la plantilla, siempre señaló que uno de los criterios era que los que tuvieran que llegar, lo hicieran lo antes posible y no en los días finales del plazo.

Así ocurrió con Luciano Vietto, quien llegó procedente del Atlético de Madrid el 4 de enero como cedido hasta el 30 de junio, mientras que el centrocampista francés Francis Coquelin lo hizo una semana después procedente del Arsenal con un contrato hasta 2020 que contempla una cláusula de rescisión de ochenta millones de euros.

En los últimos meses, el club confirmó la salida en dirección al Eibar del chileno Fabián Orellana, que se concretó en noviembre, aunque el futbolista no pudo jugar hasta enero, mientras que Rober Ibáñez se marchó a principio de año al Getafe, quien lo ha cedido al Osasuna.

Ya en los últimos días del mes de enero, el atacante valenciano Nacho Gil se marchó cedido a Las Palmas.

Hace un año, el Valencia fichó al italiano Simone Zaza a mitad de mes y el último día del mercado concretó la llegada de Orellana, en un mes en el que también cerró la cesión de Vinicius de Araujo al Huesca, la baja de Fede Cartabia, fichado por el Deportivo, pero que jugó cedido hasta el verano pasado en el Sporting de Braga.

En el último día del mercado de 2017, el portero australiano Matt Ryan salió del club en dirección al Genk Belga, mientras que justo un año antes llegaron Guilherme Siqueira y Denis Cheryshev y se marchó Lucas Orban.