El Valladolid está de enhorabuena. No solo porque el primer equipo esté haciendo una temporada notable (decimoquinto con cuatro puntos de ventaja sobre el descenso antes del parón), sino porque el filial, el Promesas, también está haciendo un gran papel en Segunda B.
El filial blanquivioleta es el cuarto del Grupo II, lo que le convierte, tal y como señala 'AS', en el cuarto mejor filial de España. Solo los de Atlético de Madrid (tercero del Grupo I), Barcelona (segundo del Grupo III) y Athletic Club (tercero del Grupo II) mejoran las cifras de los pucelanos, pues este año no hay filiales en Segunda.
El Promesas está cimentando su buen año en una férrea defensa, que le ha permitido irse al obligado parón con solo cinco derrotas en su haber, el que menos de todos los filiales, junto al Barça B.
Que el filial funcione es siempre motivo de alegría para el primer equipo. Una buena cantera siempre debería ser la piedra angular de todo proyecto deportivo, y parece que el Valladolid va en la buena dirección para lograrlo.