La suerte se alió con el Real Madrid y, sobre todo, con Odriozola, que cometió un error imperdonable y estuvo a punto de costarle la ventaja en el electrónico a su equipo.
El Celta alzó su línea de presión para intentar finalizar en campo rival, algo que incomodó demasiado al equipo blanco en los últimos compases previos al intermedio.
Iago Aspas recibió dentro del área, pero estaba adelantado con respecto al último zaguero madridista por un palmo. El gallego cedió para Brais y este no perdonó.
La decisión del VAR terminó congelando a Balaídos, que cantó y celebró por todo lo alto el tanto del conjunto celeste. Funciona el videoarbitraje y lo volvió a demostrar.
August 17, 2019