Algunas de sus peripecias fuera del mundo del fútbol están relacionados el alcohol y la nocturnidad, pero la última noticia que llega desde Wolfsburgo es la de haber llegado 45 minutos tarde al entrenamiento del equipo alegando un problema "con la alarma del movil".
Es por ello que ni la directiva ni el cuerpo técnico quieren darle una nueva oportunidad al delantero. De hecho, uno de los hombres más importantes de la directiva, Klaus Allofs, fue muy claro sobre el tema: "Nicklas no volverá a estar con el primer equipo nunca más".