Solo faltan dos jornadas y el Leganés las apura con toda la esperanza que les insufló desde su llegada Javier Aguirre, quien tendrá que hacer nuevamente malabares ante el carrusel de bajas.
Una de las últimas conocidas es la de Alexander Szymanowski, quien parecía recuperado para reaparecer ante el Athletic. Sin embargo, una lesión muscular le ha dejado definitivamente 'k.o.' para lo que queda de temporada.
No obstante, el extremo argentino mantiene un discurso que habla de la fe que hay en el vestuario. En una entrevista anterior a su lesión para 'AS', Szymanowski mostró la cara de un Leganés que solo piensa en si mismo y está pleno de confianza tras sacar siete de nueve puntos.
"Las matemáticas dicen que, con cuatro puntos, ahora mismo, hay opciones, sí, pero no iremos a empatar, sino a ganar el partido porque el empate dejaría en manos de un milagro de los grandes, divino, salvarse. Iremos a por los tres puntos desde el minuto uno", señaló.
"Si algo nos ha caracterizado en los últimos partidos es que no hemos hecho cuentas. Antes sí. Mirabas y decías 'si pierde éste y ganamos nosotros, nos metemos aquí o ahí'... eso pasa en todas las familias, pero decidimos olvidarnos del planeta, centrarnos en nosotros y cerrar nuestra portería", añadió.
¿Hay por tanto esperanza? El argentino es claro: "Ahora más que nunca. Si en algún momento hemos tenido temporada es en este. No tanto por los puntos a los que estamos de la permanencia, sino por la sensación, por la sintonía que se ha creado estos días en torno a estos últimos partidos".
Además, evita las excusas: "Las bajas de Braithwaite y En Nesyri, obviamente, fueron fundamentales. Con ellos en el equipo no sé qué habría pasado, pero eran jugadores clave. Pero con ellos en plantilla también estábamos en descenso, no en mitad de la tabla".
Y por último, alabanzas a Javier Aguirre: "Personalmente es alguien que lleva muy bien al jugador. No ha sido sencillo el reto que le ha tocado de mantener al Leganés en Primera. Desde el minuto uno hasta encontrarse con una pandemia, un confinamiento, entrenar desde casa... Luego a la vuelta hemos tenido un panorama nefasto y en ningún momento se ha vuelto loco, al revés".