La incidencia la reveló el propio seleccionador, Joachim Löw, quien destacó que el jugador del Liverpool no habría sufrido una dura lesión, pero que, pese a ello, su estado es una incógnita.
"Can se torció el tobillo y tuvo que dejar el entrenamiento", comentó en rueda de prensa el capitán del barco alemán. Esta misma tarde se le realizarán más estudios médicos para ver si se trata de un esguince o todo quedó sólo en un susto.
Su combinado nacional se la juega en la próxima campaña, pues necesitan sumar, aunque sea, un punto más para asegurarse la clasificación a semifinales.