A diferencia del 31 de agosto de 2015, el Madrid no experimentó casos como el del frustrado fichaje de David de Gea. La denominada 'Noche del fax' en la que el United envió tarde el contrato y el Madrid no pudo inscribir al guardameta ya queda lejos.
Florentino Pérez, gran animador del verano en muchos veranos, ha vivido unas semanas muy tranquilas. Álvaro Morata, firmado justo antes de la Eurocopa, es la única cara nueva en la plantilla blanca. Y Florentino, que apenas ha gastado 30 'kilos', está más que feliz.
En el Barça el diseño de la plantilla ha sido más complejo. El club catalán ha realizado hasta seis incorporaciones, siendo André Gomes y Paco Alcácer los fichajes más caros (35 y 30 millones, respectivamente).
Pero el miércoles apenas deparó sobresaltos en 'Can Barça'. Todo paz y quietud. La llegada del delantero valenciano ha resultado la última operación de Robert Fernández en un mercado estival que acaba de echar el cierre.
Al contrario que temporadas anteriores, cuando el Madrid y el Barça hacían los grandes fichajes veraniegos (Bale, Neymar o Suárez son los últimos ejemplos), la Premier League ha sido la gran animadora del mercado.
El músculo económico inglés ha estadfo más fuerte que nunca, aunque donde se ha exhibido con mayor precisión ha sido en el traspaso de Pogba al United. Pogba, deseo de Madrid y Barça, es 'red devil'. Algo está cambiando.