Honduras se jugaba la vida en Trinidad y Tobago. Necesitaba ganar y que los resultados fueran favorables para creer en el Mundial. Y vaya si lo consiguieron, sobre todo si se cuenta con la diestra de Alexander López.
El hondureño marcó el primer tanto del partido nada más arrancar. Un rechace le cayó a su pierna derecha y sólo tuvo que acomodar el cuerpo para ponerla de rosca imposible para el guardameta rival.
Su selección ganó, perdiendo Estados Unidos y Panamá, por lo que los hondureños tienen las opciones intactas para acudir al próximo Mundial.