No parecían vivir su mejor época, pero los ánimos entre Gerard Piqué y Sergio Ramos parecían haberse calmado tras las declaraciones de Ramos a la llegada a la convocatoria de 'la Roja'.
Esto decía el central del Real Madrid al respecto hace sólo unos días: "A Piqué y a mí nos gusta tirarnos alguna piedrecita, pero ahora cuando le vea le voy a dar un abrazo. Es el morbo y el pique que hay entre el Real Madrid y el Barcelona".
Ahora, con las declaraciones producidas después del Francia-España, todo el mundo se pregunta si aquello sólo era una falsa muestra de cariño para que el ambiente de la selección no estuviera tan frío como se presuponía.
Las explosivas palabras de Piqué retoman la rivalidad Barça-Madrid justo cuando la Liga vuelve con el calor al máximo. ¿Será su manera de desenterrar el hacha de guerra para la Liga tras la apacible semana con la selección?