"Estoy arrepentido por haber faltado al respeto al club y a mis compañeros"

"Estoy arrepentido por haber faltado al respeto a mi club, a mi presidente, a mi entrenador y a mis compañeros, pero el resto no lo puedo controlar. A los aficionados de la UD Las Palmas les pido disculpas desde aquí, porque hasta ahora no he podido hablar, y quiero que sepan que las pido de corazón", manifestó anoche Nauzet a la cadena Cope, en sus primeras declaraciones sobre lo ocurrido.

El jugador grancanario se considera "culpable de no haber estado a las 00.00 horas en casa, como debía haber estado", ya que no tenía permiso para salir y al día siguiente por la mañana estaba citado a entrenar, por lo que asume que no estuvo "a la altura del club".

Sin embargo, ha insistido en que él no es responsable de lo que pasó en la discoteca en la madrugada del sábado al domingo.

"Estaba con mis mejores amigos y con mi mujer, fuimos a cenar y a tomar una copa, tranquilamente, y después pasó lo que pasó. Entramos en un reservado de un local, un lugar tranquilo, y un individuo viene y me dice que me quiere matar", ha relatado.

Nauzet Alemán ha asegurado que, por su "cara de agresividad", se dio cuenta de que esa persona "no iba de broma".

"Lo apartan, yo voy a pedirle explicaciones y, de buenas a primeras, me lanza un vaso a la cara", ha explicado el jugador, que sufrió un corte en el rostro que precisó de 18 puntos de sutura.

En ese momento, comenzó a sangrar mucho, se formó "un revuelo" e intervino el personal de seguridad de la discoteca.

"Me dio cerca del ojo. Así que, dentro de lo malo, agradezco que no haya ido a más", ha apuntado Nauzet, que recalca que es falso que él agrediera a nadie, como dice que podrá comprobarse en el vídeo del incidente registrado por las cámaras de seguridad de local.

El jugador grancanario espera que el juzgado que se ha encargado del caso "haga Justicia" y, en lo que concierne al club, acata "todas sus decisiones", porque infringió sus normas.

"Cometí un error y acepto la sanción que me quieran poner. Siempre doy la cara, admito los errores, los asumo y lo único que quiero es ayudar al equipo y conseguir el objetivo de la permanencia", ha manifestado.

Además, ha enfatizado que él siente los colores de la Unión Deportiva Las Palmas desde pequeño: "Para mí, siempre ha sido lo máximo. Desde niño quise jugar en este equipo en Primera División. Soy amarillo y azul por dentro y por fuera".