El máximo accionista del Extremadura, Luis Oliver, anda muy feliz. Acaban de darle el alta tras haber estado ingresado nueve días por el coronavirus. Ya es cosa del pasado. Ahora, de manera más reflexiva, ve las cosas con más perspectiva.
Cuestionado sobre cómo pudo contagiarse, aludió a la Champions. "Siempre saludo a mucha gente en Madrid y antes de que nos enteráramos ya debía de estar demasiado extendido. Además, estuve en el Liverpool-Atlético, que viajaron 3.000 aficionados de aquí. Fue una temeridad que lo autorizaran", comentó a 'AS'.
Su experiencia de lo vivido en el hospital suena terrible. "Entré en el hospital con 1.000 muertos en España y salí con más de 8.000 ya. Es una enfermedad con mucha carga psicológica, porque no puedes ver a nadie, sólo a unos médicos que parece que están en la Luna, llenos de máscaras y guantes. Como es zona de guerra, la medicina de las 9 te la daban a las 2, porque no había. Es bestial. Todo muy inhumano", relató.
Además, durante algún momento pensó que no lo superaría. "El sábado y el domingo fueron dos de los peores días de mi vida. Además, estaba muy asustado porque no paraba de morir gente", contó.
Oliver está convencido de que el fútbol "no va a continuar". "Ninguno de los de LaLiga ha estado hospitalizado y ha visto las cosas horrorosas que yo he visto. El fútbol es un deporte de contacto y el coronavirus es cuatro veces más contagioso que un catarro. Vamos, es que puede haber diez infectados en un partido. Y todavía al fútbol profesional lo puedes aislar, intentar meterlo en una burbuja... Pero el de Segunda B y para abajo seguro que no sigue", zanjó.