El torneo continental, el cuadro blanquiazul muestra su mejor versión. Ofrece un fútbol intenso, ordenado y con gol, el gran déficit del equipo en estos meses iniciales de campaña. El partido de ayer, además, supuso la primera victoria de Pablo Machín al frente del banquillo.
La Europa League supone el regreso al viejo continente doce años después. Históricamente, este torneo ha supuesto una gran motivación para todos los 'pericos', finalistas en dos ocasiones: en 1998 y en 2007. Todos los estamentos de la entidad, así como los aficionados, están muy ilusionados.
Disputar varias competiciones, además, permite a Machín dar entrada a los futbolistas menos habituales. Sin ir más lejos, el delantero Campuzano fue este jueves la sensación en Bulgaria al marcar el tanto de la victoria. La plantilla tiene hambre y ganas de convencer a los nuevos responsables del equipo.
De todos modos, la campaña actual no ha arrancado como esperaban. Y no por la marcha en la Europa League, sino por el desempeño del equipo en LaLiga. El Espanyol es penúltimo en la clasificación con cinco puntos. Es, además, el único equipo de Primera que no ha sumado nada en su estadio y el menos realizador (cuatro goles).
El vestuario asume que la Europa League es, actualmente, sólo un paréntesis ilusionante. "Europa siempre es bonito, pero lo importante es LaLiga. Ahí estamos en una situación delicada y cuanto antes salgamos, mejor", dijo ayer Iturraspe. Su compañero Bernardo confía en que sirva de impulso: "Debemos aprovechar esta inercia".
Pablo Machín también opina en la misma línea que el resto del grupo. El entrenador, de hecho, realizó rotaciones contra el Ludogorets, en Bulgaria, pensando en el importante compromiso del domingo contra el Levante, a las 16.00 horas en el Ciutat de València. El choque está marcado en rojo.
La plantilla blanquiazul, que aterrizó a las cuatro de la madrugada, regresará este viernes por la tarde a los entrenamientos en la Ciudad Deportiva Dani Jarque.
El Espanyol está decidido a aparcar la euforia europea y centrarse en la rutina de LaLiga. Por ahora, no hay margen posible para dejarla de lado.