Lo que iba a ser un despeje del defensa del Montpellier acabó en una expulsión del propio jugador. Y es que, tras darle al balón y rebotar en Nordin, le lanzó un plantillazo a la tibia del jugador del Saint-Étienne.
La acción, en principio, había quedado en una tarjeta amarilla. Sin embargo, el colegiado del encuentro recibió la llamada del árbitro situado en la sala del VOR para revisar una acción que acabó con Congré en los vestuarios.
Se calentó el partido por momentos en el campo del Saint-Étienne. Y es que, tras la expulsión llegaron las críticas del Montpellier tras una falta del propio Nordin. Hasta cuatro tarjetas se vieron en apenas tres minutos, dos de ellas por protestar.
Pero no acabó ahí. Apenas diez minutos después de que Congré fuese expulsado, Cabella recibió la segunda tarjeta amarilla antes de que el Montpellier se adelantase gracias al tanto de Laborde.