Cuando parecía que Mario Hermoso, Savic y Giménez estaban por delante del él en la lista de titulares, Felipe Monteiro aprovechó las rotaciones para hacer su carta de presentación.
Y vaya carta. El zaguero brasileño se confirmó como un gran activo en el juego aéreo. Ningún otro jugador consiguió ganar más balones por arriba en el duelo ante el Celta de Vigo en el Metropolitano.
No solo lo hizo de defensa. El futbolista también se destapó como un atacante feroz. Logró efectuar tres remates, haciendo efectivo su poderío en ambas áreas al mismo tiempo.
También a ras de césped fue un muro que ganó casi todos los duelos que tuvo. De hecho, se le contabilizaron hasta cinco recuperaciones y un 100% de efectividad en las entradas.
El zaguero ya demostró estas cualidades en el Oporto, ahora queda ver si seguira ostentando un hueco en la rotación más secundaria o el Cholo comienza a usarle con más asiduidad.