El fichaje de Neymar por parte del Barcelona procedente de Santos fue determinante para que Sandro Rosell pisase y estuviese dos años en la cárcel. El ex presidente asegura que volvería a fichar de nuevo al brasileño.
Rosell pasó por los micrófonos del 'Partidazo de COPE' para hablar de su paso por la cárcel y del mercado del Barcelona de cara a la próxima temporada, donde aparecen los nombres de Neymar y de Lautaro Martínez.
"Si yo fuera presidente del Barça, intentaría fichar a Neymar. Es el segundo mejor jugador del mundo después de Messi y encaja perfectamente en la filosofía del club. Pero con la experiencia lo ficharía con dos contratos, uno deportivo y otro de comportamiento", explicó el ex mandatario azulgrana, consciente de los problemas extradeportivos que ha tenido el brasileño.
El otro gran nombre es el del Lautaro Martínez, el principal objetivo de la secretaría técnica 'culé'. Rosell aseguró que "no ficharía a Lautaro por 111 millones de euros", pero que "sí buscaría dos jugadores de otras posiciones para hacer un trueque". "Es difícil, pero es lo que intentaría", añadió.
Rosell descartó su posible candidatura a la presidencia del Barça y busca "algo más relajado, no tan histriónico o agresivo". "Pero sin locura, y disfrutando más de mis amigos y familia. Darle importancia a las pequeñas cosas, tomándome una cerveza fría con un amigo en un bar en lugar de pensar qué negocio voy a hacer", aseveró.
El ex presidente, que se considera "independentista de corazón" pero "de cabeza no", relató su paso por la cárcel. "Dos años de vida allí no tiene precio. ¿Qué valen dos años en la vida de una persona? Es terrible que te lo hayan robado", aseveró.
"He vuelto a la cárcel a ver a un par de compañeros que siguen dentro. Amigos que hicimos y son de fuera o no tienen familia que vayan a verlo. He ido a llevarles zapatillas de deporte, que es lo que se necesita en la cárcel. Con otros que han ido saliendo nos hemos visto, y tengo un chat con otros presos. Es chulo, me gusta seguir en contacto con ellos", explicó Rosell.
Aseguró el ex presidente del Barcelona que tuvo una "pelea tan cerca" que se llegó a manchar de sangre. "Un tarad* me dijo: 'Eres un catalán de mierd* y todos los catalanes tienen que morir'. Y otro me dijo: 'Si no me compras un café cada día, te daré una somanta de h*stias'. No lo hice. Le encaré y le dije que se equivocaba. En la cárcel tienes 100 euros a la semana y yo tenía muchos gastos en papel, sellos, tarjetas de teléfono...", informó.
Rosell aclaró que "toda la gente que manda a otros a la cárcel" debería pasar unos días allí, "para que se den cuenta de que antes de tomar esa decisión hay que pensárselo mucho". "Es una experiencia vital, te redescubres a ti mismo, pero es un sitio malo", sentenció.