Hansi Flick, el técnico interino que llegó tras el terremoto de la destitución de Kovac, es ahora el entrenador de moda. Con ese perfil bajo, ya en pleno escaparate del fútbol mundial, era un hombre felicísimo en sala de prensa.
"Claro que es impresionante y es una señal que mandamos a los otros equipos. Tenemos que concentrarnos en el próximo partido y en eso estamos. Debemos preparar bien el próximo partido de la mejor manera posible. Sabemos que el próximo rival será muy duro", comentó el entrenador del Bayern.
Así que no le será fácil colgar con el cartel de favorito al título estos días. "Hemos hecho un partido increíble. Estamos contentos y satisfechos, pero todavía quedan partidos para ser campeones. Sabemos que puede pasar de todo. Estamos muy contentos por el rendimiento, claro. A partir de mañana, a cargar baterías para la semifinal", comentó.
La anécdota de su comparecencia tuvo lugar cuando le preguntaron las cosas que tenía que mejorar el equipo para acabar levantando 'la Orejona'. ""Después de un 2-8 no creo que deba responder a una pregunta como esta. Se pueden sacar los aspectos positivos. La presión, la recuperación, cosas que queríamos hacer y que hemos hecho perfectamente. Analizaremos el partido para ver cosas a mejorar".
Flick se refirió igualmente al gran momento que vive el fútbol alemán en la Champions. "Estoy contento por los otros dos técnicos alemanes que también están en semis. Conozco esta sensación. Estamos entre los mejores de Europa y podemos estar contentos. Ahora todos queremos llegar a la final. Esperemos que pueda haber una final alemana".