Georgina no proviene de ninguna familia adinerada, nunca se había codeado con la 'jet set' ni tampoco se sentía como una modelo.
Sin embargo, la joven ha conseguido conquistar a Cristiano, uno de los mejores del mundo, a pesar de que parece la antítesis de otras 'wags'. De Jaca, a viajar por todo el mundo en un avión privado de 19 millones de euros. ¿Pero qué la hace distinta?
El binomio modelo-futbolista es muy popular. La mayoría de jugadores tienen como parejas a jóvenes de un estilo muy definido: guapas, altas, delgadas, muchas de ellas modelos que comparten elaboradas imágenes en Instagram. Georgina no lo cumple.
La novia del madridista tiene una larga melena negra, rasgos menos dulces que la mayoría y una figura curvilínea muy alejada de lo habitual el mundo de la moda. 'Gio', como la llama el futbolista, tampoco provenía de las pasarelas o de los escenarios. Es, en definitiva, la 'Cenicienta' del fútbol. Aparentemente, una chica más normal.
Georgina era una mujer completamente anónima de 22 años, diez menos que el jugador, a la que Cristiano conoció en una tienda de Gucci, firma de la que era dependienta. Fue despedida porque, al hacerse pública su relación con él, la boutique de la calle Serrano de Madrid estaba asediada por periodistas, algo que no gustaba a los clientes.
El crack portugués le ayudó a conseguir otro empleo en el córner de Prada de El Corte Inglés, pero ocurrió lo mismo. Dejó el trabajo y, ahora, acompaña a Cristiano en algunos deportivos internacionales y en sus vacaciones mientras espera su primer hijo, el primero que también tendrá en común con el madridista.
¿Pero qué se sabe del pasado de Georgina? Era camarera en Jaca, la ciudad aragonesa donde nació. Según la revista lusa 'VIP', vive alejada de sus padres, separados desde hace tiempo. Su padre viviría en Argentina y su madre, en Italia. De acuerdo a este medio, la madre de CR7, Dolores Aveiro, se convirtió también una madre para ella.
Pasado un tiempo, Georgina se marchó como 'au pair' a Bristol (Inglaterra), hasta que se estableció en Madrid, empezó a trabajar en Gucci y su vida dio un vuelco al conocer a Cristiano.
Ahora, la joven acaba de ser contratada por la agencia 'Uno Models', que asegura que la ha fichado como una modelo más y que no contará con privilegios por ser la pareja del atacante del Real Madrid.
No se conocen los términos económicos del contrato, pero Georgina, que no se pronunció sobre la relación que mantenía con Cristiano hasta que salió a la luz y él lo hizo, exigió no hacer entrevistas ni hablar de su noviazgo.
Parece que la personalidad de 'Gio', una mujer independiente hecha a sí misma con un carácter sencillo y discreto, junto a su figura exhuberante, muy lejos del canon de las 'top models', es lo que ha conquistado a CR7. El crack portugués se quedó con la normalidad.