Tiene 21 añitos y ya está dejando huella con Flamengo. Apenas transcurrieron cinco minutos en el clásico contra Botafogo y Matheus Sávio levantó de sus asientos a los espectadores.
Una obra de arte que empezó tras una gran salida desde su campo de los locales. El joven jugador brasileño recibió en la banda izquierda y no dudó en encarar a un rival.
Le tiró varias bicicletas al más puro estilo Ronaldo Nazário y se abrió un hueco con la pierna derecha. Rápidamente, el centrocampista le pegó a portería. El balón cogió una parábola y acabó entrando.
— f (@crfellipe) 21 de julio de 2018