Con el París Saint-Germain campeón de la Ligue 1, la lucha por la segunda posición que da acceso directo a la próxima edición de la Liga de Campeones se recrudece. El Mónaco, después de perder 7-1 frente al París Saint Germain la pasada jornada, continúa con su caída libre y sólo tiene un punto de renta sobre el Marsella para sostener ese puesto tan codiciado.
Antes de su caída contra el Guingamp, el Mónaco conocía el resultado del Marsella, que con los dobletes del griego Konstantinos Mitroglou y de Florian Thauvin, a los que se sumó el gol del argentino Lucas Ocampos, prolongó su buena racha y dejó en mal lugar al Lille, que dio un paso atrás en sus esperanzas de permanencia. Es penúltimo, a un punto del Toulouse, que tiene un partido pendiente.
A falta de cuatro jornadas para el final, el equipo de Rudi García, que lleva tres victorias y un empate en sus últimos cuatro encuentros, es cuarto en la tabla con los mismos puntos que el Lyon, tercero y dueño de la última plaza que da acceso a jugar la Liga de Campeones del próximo año tras golear a domicilio al Dijon el viernes (2-5).
Después de la victoria del Marsella, el Mónaco tenía que seguir sus pasos para no sentir la presión. Sin embargo, el peso de la derrota ante el París Saint-Germain pudo con el cuadro del principado. Además, no ayudó la expulsión en el minuto 21 de Jemerson, que sacó con la mano debajo de la línea un remate del Guingamp.
El penalti lo transformó Jimmy Briand y el 1-0 subió al marcador no mucho antes del golazo de la jornada, obra de Etienne Didot, que marcó al estilo Gaizka Mendieta. El jugador del Guingamp enganchó una volea impresionante tras un saque de córner y su equipo se marchó al descanso con una renta de dos goles.
En la segunda parte, el Mónaco siguió con su caída en picado y justo en la reanudación Marcus Thuram hizo el tercero para ahondar en la herida monegasca, que cerró su semana negra con otra derrota dolorosa con la que peligra su segunda plaza.
Mejor le fue la jornada al Toulouse, que cogió aire en su pelea por huir del descenso y consiguió una victoria balsámica frente al Angers (2-0).
Después de ocho jornadas sin ganar, con cuatro derrotas y cuatro empates, consiguió tres puntos gracias a los tantos de Yaya Sanogo y del marfileño Max Gradel, que sirvieron al cuadro de Pascual Dupraz para colocarse cuatro por encima del Troyes, último club que descendería a la Ligue 2.
También ganó el Amiens, que derrotó 3-1 al Estrasburgo con los tantos de Thomas Monconduit, Harisson Manzala y Gael Kakuta para asentarse en la zona tranquila de la clasificación y rozar la permanencia matemática. Una victoria más en los cuatro partidos que restan, y seguramente estará salvado.
Cerró la jornada del sábado el Metz-Caen, que empataron 1-1 para sumar un resultado que no sirve en los intereses de ninguno de los dos. El Metz, colista, necesitaba ganar para acercarse a los puestos que dan la salvación. A siete puntos del Toulouse, prácticamente necesitará un milagro para seguir en la Ligue 1 la próxima temporada.
El Caen, quería acercarse a la permanencia matemática, pero aún tendrá que pelear. Está siete puntos por encima del Troyes, último club que perdería la categoría.