No tuvo que despeinarse demasiado Gremio para conseguir una importante victoria ante un rival que prácticamente dice adiós al sueño de alcanzar la final del torneo.
Los visitantes llegaron más y mejor ante el portero rival, y controlaron un encuentro que comenzaron a poner a su favor a los 20 minutos. Luan Guilherme, asistido por Oliveira, colocaba el 0-1 en el luminoso.
Ya en el segundo tiempo, ante la ausencia de reacción de los locales, Douglas sentenció el choque y dio un paso más que esencial para afrontar con bastantes garantías el partido de vuelta.
Salvo hecatombe, algo no tan extraño en el fútbol, el club presidido por Romildo Bolzan debería plantarse en la final de la Copa.