El francés jugó con el '17' en San Mamés a la espera de que se solucionase el futuro del brasileño. Una vez cerrada su cesión al conjunto bávaro, le tocaba heredar. Pero con la burocracia hemos topado.
"El jugador tendrá que exhibir el mismo dorsal en todos y cada uno de los partidos oficiales que juegue esa temporada", se dice expresamente en el apartado 5 del artículo 216 del reglamento de la Federación Española.
Es decir, alguno de los futbolistas que no estuvo en San Mamés sí podría hacerse con el '7' que libera Coutinho.
Así que lo único que puede modificar el Barcelona es la relación de altas y bajas de aquí al 2 de septiembre, cuando se cierre el mercado de fichajes.
Lo único bueno de esta situación es que los aficionados que se hayan comprado ya la camiseta de Griezmann con el número 17 no tendrán que adquirirla de nuevo con el dorsal fetiche del galo en el Atlético de Madrid.