"Tengo confianza porque estoy encantado con estos chicos. En el momento malo de la temporada, los jugadores no dejaron de intentarlo. Cuando esto pasa, el entrenador siempre está feliz", afirmó Guardiola tras el encuentro.
Respecto al partido en sí, Pep cree que el City ha cometido los mismos pecados de siempre. "Hemos tenido el problema de toda la temporada: fallar muchas ocasiones. El partido debió estar cerrado 30 minutos antes", aunque "quizás necesitas esto para mejorar, así que hoy estoy muy contento", apuntó.
Su siguiente objetivo son los cuartos de la Champions. "Queremos pasar, pero no podemos olvidar contra quien jugamos: el mejor equipo del mundo marcando goles. Por números, su ataque es el mejor", dijo Guardiola, para teminar diciendo que esta semana que entra es la más importante de la temproada.