Hasselbaink defiende su inocencia, aunque reconoce haber pecado de ingenuo

Hasselbaink, de 44 años, apareció esta semana en un vídeo publicado por el diario británico The Telegraph negociando una tarifa de 55.000 libras (63.800 euros) para viajar a Singapur para negociar, supuestamente, con una compañía asiática de representación de futbolistas.

El antiguo delantero de Atlético de Madrid, Chelsea y Middlesbrough, entre otros, ha negado haber pedido esas 55.000 libras para trabajar con esa compañía para incorporar jugadores a su equipo, el QPR, aunque ha reconocido que fue "ingenuo".

"No, nunca. Nunca me han ofrecido dinero y nunca habría entrado en ese juego", dijo Hasselbaink en una entrevista con la cadena Sky Sports, al tiempo que afirmó que se arrepiente "mucho".

"Mucho, muchísimo. Cuando tienes tiempo y piensas, echas la vista atrás y ves que has sido un ingenuo. Y yo lo fui", señaló. "Pero nunca he pedido ni recibido dinero para vender o comprar a un jugador para un equipo. Nunca haría eso", agregó.

"Lo más duro de todo es que me tomo mi trabajo muy en serio. Muy, muy, muy en serio, y quiero tener éxito en este negocio. No puedo hablar por otros (técnicos), sólo por mí. Y aceptar dinero no es algo que yo haría", prosiguió.

El entrenador del QPR, equipo que milita en la Championship, segunda categoría del fútbol inglés, ha aparecido en una de las últimas filmaciones del Telegraph, que asegura que hay ocho técnicos que dirigen o han dirigido en la Premier League y dos de la Championship implicados en casos similares de corrupción.

De acuerdo al diario, estos entrenadores se habrían lucrado de forma ilegal mediante el cobro de comisiones en la contratación y firma de jugadores.

En su entrevista con Sky Sports, Hasselbaink insistió en que en la reunión sólo negociaba una cantidad por ir a dar una charla a Singapur y que él no tiene ningún poder en los fichajes, algo que está en manos de Les Ferdinand y de la junta directiva del QPR.

"Entiendo que la gente pueda pensar que 55.000 libras (por una charla) es mucho dinero. Y es verdad que es mucho, pero, en la industria en la que estoy, tengo la suerte de poder generar ese tipo de cantidades", explicó el neerlandés.

Además del técnico del QPR, otros implicados en la trama de corrupción que azota el balompié inglés son el ya exseleccionador inglés Sam Allardyce; el italiano Massimo Celino, propietario del Leeds United; y Tommy Wright, segundo entrenador del Barnsley.

Allardyce fue la primera víctima en esta trama. El técnico, de 61 años, fue destituido a última hora del martes, 67 días después de su nombramiento, tras aparecer en un vídeo grabado con cámara oculta en el que explica, entre otras cuestiones, cómo burlar las leyes del mercado de fichajes.