Eden Hazard venía para ser el nuevo 'galáctico', un deseo histórico de Florentino Pérez. Pero ahora mismo es la gran frustración de todo el madridismo. Su última lesión, otro varapalo, le devolverá un tiempo a la enfermería, donde ya ha pasado casi tanto tiempo como lo estuvo tras siete años en el Chelsea.
Dicho dato es escalofriante. Son ya 18 los encuentros que se ha perdido el atacante belga desde que vino al Real Madrid en verano. En Londres, desde 2012 a 2020, únicamente se cayó en 20. La semana entrante, que traerás las visitas de City y Barcelona, hará que iguale ya esos números.
De hecho, solo ha jugado 16 partidos oficiales con su actual club, por lo que ha pasado más tiempo en la enfermería que en el césped.
A sus 29 años, las lesiones no han sido algo habitual en el belga, del que incluso los propios médicos del Madrid se sorprendían recientemente por su fortaleza física. Pero parece que el año pasado algo cambió; entonces se perdió tres de los siete choques con el Chelsea.
El inicio de esta temporada fue ya un aviso de lo que le iba a esperar: en el último entrenamiento antes de empezar la Liga en Balaídos, sufrió una lesión muscular que ralentizó su debut hasta la jornada 4, precisamente ante el Levante, con el que llegó su última lesión.
Apenas dos meses después, tras disputar 13 partidos de blanco y cuatro con su selección, llegó esa patada de su compatriota Meunier que le dejó un calvario de dos meses y medio en el tobillo derecho hasta que reapareció con el Celta, aunque de manera efímera.