Hervás, de 29 años, echa la mirada atrás para ver la luz al tras salir de aquel túnel en el que entró tras fichar por el Sevilla de Monchi en enero de 2012, después de ser traspasado por el Córdoba, donde continuó cedido para jugar la fase de ascenso a Primera, reto que no consiguió con los blanquiverdes, pero a la siguiente campaña debutó en la elite con los hispalenses, aunque sólo jugó nueve partidos.
Al cordobés no le fue bien en el Sevilla, que lo cedió sucesivamente hasta durante dos campañas, primero al Hércules y luego al Sabadell, con los que acabó descendiendo a Segunda B, para, posteriormente, rescindir con los sevillistas y vivir su primera experiencia en el extranjero con el Brisbane en la Super Liga de Australia.
"En lo deportivo, me está yendo muy bien ahora porque estoy jugando y estamos luchando por meternos en Europa. Mejor no podía estar", reiteró a 'EFE' Hervás, que además esta temporada contará con la compañía de su mujer, que ya está "súper adaptada porque ahora hace buen tiempo".
Hervás afirmó que Finlandia es un país "más avanzado que España", algo que "se nota en el transporte, la seguridad social y en todo aunque también hay algunas carencias que no ven pero sí que es verdad que es un país que va unos pasos por delante a otros", como por ejemplo Bosnia Herzegovina, donde sufrió un breve paso en verano de 2016 que le llevo a volver a España para enrolarse con el Mirandés.
En lo deportivo, cuenta que "el fútbol finés es físico, pero también tienen la idea de tener el balón en posesión", de ahí que "van mejorando y además hay gente muy buena", de ahí que su objetivo sea que el campeón vaya directamente a la Europa League, algo que sería "un gran avance porque vendrá más gente, habrá más dinero".
Pese a los miles de kilómetros de distancia, el mediocentro reconoce que sigue muy de cerca toda la actualidad del Córdoba y lo hace porque su corazón es "blanquiverde", para comentar que aunque la situación actual es "mala, peor era en diciembre o en enero cuando todo el mundo lo daba por muerto, pero al final se salvó".
"Espero desde la distancia que se solucione todo lo antes posible, porque la afición se merece estabilidad. Seguro que los que están, están trabajando para que se solucione y espero que sea pronto, claro. Yo estaría encantadísimo de ayudar. Si me llaman, estaría allí mañana", concluyó Hervás desde Espoo.