"La FIFA trata a Cisjordania como si estuviera dentro de la Asociación Palestina de Fútbol. No está claro por qué necesita otro año para decidir si sigue o no sus propias reglas", lamentó la responsable regional de incidencia política de HRW, Sari Bashi, en un comunicado.
Lo hizo después de que la FIFA anunciara hoy que ve "prematuro" tomar una decisión sobre este tema, dejando la cuestión fuera de la agenda del congreso que se celebrará mañana en Baréin, país que impidió el acceso a su territorio al director regional de HRW para Israel y Palestina, Omar Shakir, quien viajó para "presionar" sobre los partidos en los asentamientos.
"Las colonias son ilegales según la Cuarta Convención de Ginebra y contribuyen a graves abusos de los derechos humanos", expuso Bashi, y señaló que hay varios equipos israelíes en la FIFA "que tienen su base en asentamientos (...) una tierra que ha sido tomada de manera ilegal a los palestinos".
Las competiciones israelíes contradicen el artículo 72 de los estatutos de la FIFA que establece que "las asociaciones miembro y sus clubes no podrán jugar en territorio de otra asociación miembro sin su aprobación".
Este martes, la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) condenó la "presión" del Gobierno israelí para evitar abordar la petición palestina de suspender en seis meses a cinco equipos israelíes en colonias, tras la llamada que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, habría hecho esta semana y con este objetivo al presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
El debate debía girar en torno a un informe elaborado por Tokyo Sexwale, jefe del Comité de Observación establecido por la FIFA para analizar las reclamaciones palestinas contra Israel.
El documento planteaba tres soluciones: mantener el "status quo" que "llevaría a acciones legales contra la FIFA"; suspender a los equipos colonos de la Liga israelí; o seguir negociando, opción por la que finalmente se ha apostado.