El extremo alavesista quiso colgar el balón desde la izquierda al corazón del área y, como tantas veces pasa, el balón se envenenó y terminó entrando en la meta de Lizoain.
Pero el meta amarillo y el resto de sus compañeros se quejaron amargamente por la posición de Deyverson. En claro fuera de juego, el delantero corrió hacia el balón, pero no hizo ningún intento de rematar.
Los locales alegaban que, aunque no hubiera tocado o intentado tocar el balón, su posición le hacía influir en el área y contribuyó a distraer a Lizoain.
El reglamento cambió esta temporada y recoge que debe haber intención de disputar el balón, por lo que la polémica está servida.
Aquí el gol >> https://t.co/yjHQ8Cn2LO
— La Liga en 11úmeros (@laligaennumeros) 23 de abril de 2017