Tras un brutal final de temporada, el Milan inició este lunes 21 de septiembre su andadura en la Serie A 2020-21 con el claro objetivo de pelear desde el inicio por el título.
El primer rival era un Bologna que acudía a San Siro a buscar una sorpresa que, desde muy pronto, se puso más que complicada por el primer gol del cuadro lombardo en la presente campaña. Y el mismo no podía llevar otra firma que la de Zlatan Ibrahimovic.
El sueco abrió la lata y estrenó su cuenta goleadora personal (y la del equipo) esta campaña con un cabezazo marca de la casa ante el que nada pudo hacer Skorupski.
La gran definición del ariete llegó en el 35' tras un preciso centro del ex madridista Theo Hernández, que le puso el balón perfecto desde la izquierda con su pierna zurda.
Poesteriormente, y ya en el segundo tiempo, el astro sueco amplió su cuenta anotadora y firmó un doblete en solo 50 minutos al transformar un penalti que anotó por toda la escuadra.