Guido Rodríguez alcanzó a rematar un buen envío desde la esquina y el balón se coló en la portería de Tigres superando a Guzmán. América empataba, pero esa realidad apenas se mantendría en el tiempo.
Y es que el colegiado validó el gol, lo anuló, volvió a validarlo y, finalmente, decidió consultar con su asistente para encontrar una respuesta. Y todo en sólo unos minutos.
Pero lo mejor estaba aún por venir. En un principio, el trencilla señaló falta en ataque a instancias del juez de línea. Pero, tras debatir de nuevo con su auxiliar, decidió pitar penalti a favor de las 'águilas' por un contacto que parece apreciarse de Ayala a Valdez. Ménez acabó marcando el penalti y firmando su segundo tanto en México.
Tras la montaña rusa de emociones, todos se quedaron atónitos viendo cómo el árbitro 'mancillaba' el famoso lema de "penalti-gol es gol", una máxima del fútbol de barrio.
11 de febrero de 2018