La zaga del todopoderoso City es el punto débil para Pep Guardiola, que está como loco por traerse a algún refuerzo de garantías en este mercado invernal.
Van Dijk era el fichaje a conseguir, pero el Liverpool estuvo más rapido y ya ha firmado al central. Según 'The Telegraph', tras el mal sabor de boca que deja la frustración por no fichar al holandés, el City ha puesto su mirada en Íñigo.
Los 'citizens' sufren importantes bajas en la línea defensiva, ya que Stones, Kompany y Mendy están en el dique seco. El primero ya ha vuelto a los entrenamientos, pero la preocupación llega por sus continuas lesiones.