Osama Abu Kuwait, Ihsan Al Shuwaikh, Nehad Al Hussen y Ahmed Ahawakh han sido los cuatro jugadores que han sido asesinados por el Daesh. También han asesinado de esta manera al técnico y a otra persona no identificada.
La ejecución se produjo ante cientos de personas, incluyendo niños, en una plaza de Raqqa, capital siria del autodenominado "Califato Islámico" de ISIS. Las imágenes fueron recogidas por los espectadores y difundidas en las redes sociales.
El Estado Islámico ya ha sido autor de otros ataques relacionados con el mundo del fútbol, deporte que prohibió hace dos años cuando tomó la ciudad.
El pasado 14 de mayo cometió un ataque terrorista en la sede de Balad de la peña madridista de Irak y murieron 16 personas. En 2015, la organización terrorista ejecutó públicamente y con armas automáticas a 13 adolescentes por ver por televisión el partido de la Copa de Asia de Naciones entre Irak y Jordania.