Tras finalizar su cesión al Bayern de Múnich, James volvía a formar parte de la plantilla del Real Madrid este mismo verano. Prácticamente nadie apostaba por su continuidad, pero los últimos hechos han cambiado la manera de ver su situación. Parece más viable que siga en el cuadro 'merengue' a que finalmente tome una salida.
Ver para creer. Hace unas semanas, Atlético de Madrid y Nápoles peleaban por hacerse con los servicios del mediapunta colombiano, presumiblemente sin sitio en un Madrid plagado de futbolistas que juegan en la misma zona que el 'cafetero'.
Pero el destino ha trazado una línea temporal en la que James tiene más posibilidades de terminar la temporada que de abandonar la entidad. La lesión de Asensio, el flojo nivel que han mostrado otros efectivos y la imperiosa necesidad de ver caras nuevas ante la falta de más fichajes han hecho que el madridismo recupere la ilusión con él.
Y Zidane parece que lo cocina a fuego lento. Tras una pretemporada de altibajos, 'Zizou' dejó un mensaje claro con su convocatoria ante el Celta: James es uno más para él. De hecho, el colombiano formó parte de la lista.
Pese a que no consiguió tener minutos en Balaídos, el 'cafetero' ya volvió a estar en un nuevo viaje junto al resto del grupo. Sigue dando pasos para poder mantenerse en las filas 'merengues' cuando se cierre el mercado.
Y ya solo le queda jugar. Esa 'reconciliación' con el club, con Zidane y con la afición se puede dar el próximo sábado en el partido que albergará el Santiago Bernabéu entre el Real Madrid y Real Valladolid.