Tanto Pepe Mel como la dirección deportiva de la UD Las Palmas tenían claro que Javi Castellano era uno de los descartes para la presente temporada. El centrocampista, sin embargo, se empeñó en quedarse en el club por novena campaña consecutiva y ahora es un fijo para el entrenador amarillo.
El jugador canario se perdió el choque de este sábado en Riazor, que el equipo insular perdió por 2-1, tras once titularidades consecutivas en Liga. La amarilla vista en el derbi ante el Tenerife acarreaba sanción, por lo que el jugador no pudo saltar al césped del estadio blanquiazul.
Se da la circunstancia de que Javi Castellano solo había disputado 65 minutos en las 14 primeras jornadas de competición. Un bagaje que evidencia la ya mencionada falta de confianza de Pepe Mel en el jugador a principio de temporada.
Todo cambió el 9 de noviembre ante el Alcorcón. El centrocampista completó los 90 minutos frente a los madrileños, algo que repitió ante Mirandés, Oviedo, Extremadura, Numancia, Elche, Rayo Vallecano, Fuenlabrada, Zaragoza, Racing de Santander y Tenerife.
Precisamente en ese encuentro ante el equipo 'alfarero' vio su primera amarilla del curso, un ciclo que cerró frente al cuadro dirigido por Rubén Baraja. En ese periplo, Mel solo lo reservó en el compromiso copero en Badajoz.