Los dos jugadores 'pericos' pudieron festejar la efeméride con un buen punto. Sumar en San Mamés siempre tiene mérito, más aún ante este Athletic al que Garitano le ha dado un sello mucho más competitivo.
Por su parte, el capitán llegó a una cifra que le confirma como un jugador con gran trayectoria en la historia del Espanyol: ya son 230 partidos en Liga por los 20 que ha disputado en la Copa del Rey.
En cuanto al joven futbolista, que aún tiene poco recorrido en la competición, se está consolidando cada vez más como una apuesta de futuro del Espanyol.
No es fácil llegar al medio centenar de encuentros en la Liga con solo 21 años.