"Es complicado, en una temporada tan larga. Tiene dos lecturas. La primera es positiva y es que cuando das un nivel óptimo se te exige que des el mayor tiempo posible ese nivel", comenzó diciendo Moyano.
Cree que es normal su bajada de rendimiento. "Si ahora el míster nota un pequeño bajón, él y yo ya lo comentamos ayer, es hasta normal por la cantidad de minutos", explicó.
"En mi posición, en el lateral, el esfuerzo es bastante grande cada encuentro. Yo estoy acostumbrado a jugar una cantidad de partidos importantes y sí es verdad que suelo tener ese pequeño bajón en el cual se vacía un poco el depósito y te cuesta un poco más. Mientras el míster siga contando conmigo…", se justificó el capitán.
Eso sí, sabe dónde está el límite. "Donde no puedo fallar es a nivel defensivo. Es verdad que con balón me costó un poco más. Si que me encontraba un poco más cansado de lo normal, pero a nivel defensivo si me estoy encontrando bien", dijo también.
Pero reconoció que, aunque no quiere parar, entendería que el entrenador le sentase si viese cosas que no le gustan.
Sobre el partido contra el Sevilla Atlético, Javi Moyano destacó la gran importancia que tiene este partido para el Valladolid. "No es la última oportunidad, sino que es la oportunidad. Siempre teniendo en cuenta que el partido inmediato siempre es el más importante", afirmó.
La razón para él son los dos siguientes encuentros, pues ambos se jugarán en Zorrilla, y podrían permitir al Valladolid dar un salto importante en la tabla.
Sobre el filial sevillista, reconoció que quizá les pese la juventud, pero invitó a no confiarse a los suyos. "Yo les he visto los últimos partidos y andan bastante bien y tenemos que tener atención, cuidado y paciencia si queremos sacar algo positivo en Sevilla", advirtió.
Terminó la entrevista hablando de lo importante que es puntuar en casa, y que por eso, cada punto logrado lejos de Zorrilla vale su peso en oro.