El panorarma arlequinado de este año no tiene nada que ver con el del anterior. Es tiempo de soñar. Pero los sueños sin trabajo son imposibles en la categoría de bronce. El Castellón sublimó esa fórmula para sumar otra victoria y otra jornada sin derrota.
El equipo de Óscar Cano volvió a los puestos de ascenso con la satisfacción de haber hecho bastante para salir airoso e indemne de un partido en un campo difícil.
La primera parte fue albinegra, sin duda. Absorbió la posesión y no sufrió en defensa, aunque se echó en falta algo más de colmillo. César Díaz, eso sí, avisó con un intento de vaselina. Pero fue Javi Serra el que abrió la lata.
Lo consiguió merced a in perfecto cabezazo a los 35 minutos que supusieron un buen varapalo para los locales, que empezaron a tener que cambiar el chip. Y casi más aún si hubiera tenido algo más de fortuna el lateral Víctor en su intento poco después.
Claro que el Prat también lamentó la gran parada de Álvaro Campos, salvador para los castellonenses, así que había promesa de alternativas tras la reanudación.
De heho, en cinco minutos otros dos paradones del guardameta mantuvieron el triunfo en el electrónico. Con apenas un susto a la contra de César Díaz, tanto el meta como la defensa supieron esquivar el peligro.
La última fotografía del encuentro fue la del enésimo vuelo de Álvaro Campos para evitar una igualada que buscó continuamente pero no encontró.