Rocambolesca historia la que rodeó al fichaje de Ronaldo Nazario por el Barça. El PSV llegó a un acuerdo con los azulgranas por el traspaso de su estrella, aunque le dieron al club un plazo para conseguir el acuerdo con el jugador.
El punta, que había firmado 54 goles en 57 partidos con los holandeses, se encontraba en Brasil y Gaspart crucó el 'charco' en busca de su rúbrica para cerrar la negociación de manera satisfactoria.
Sin embargo, y según explicó el ex presidente barcelonista a 'Goal', el conjunto de la Eredivisie se arrepintió y pidió a la Confederación Brasileña que evitase por todos los medios que la entidad del Camp Nou pudiera entablar contacto personal con Ronaldo.
Así contó Gaspart su solución a un problema que desconocía: "Había dos gorilas que no me querían dejar pasar. Conocí a un camarero español del hotel y me prestó su traje, una bandeja y una Coca-Cola". Sin duda, una historia al nivel del protagonista.
"Me difracé, les di los buenos días a los dos gorilas y les dije que el huésped de tal habitación había pedido un refresco. Piqué en la puerta de Ronaldo, que no entendía nada, y estampó su firma en el contrato encima de la cama", añadió.