Simeone está hundido, la plantilla también y la afición tocada... el triunfo volvió a estar al alcance de la mano y la crueldad volvió a cebarse con el Atlético de Madrid.
Pero si algo ha caracterizado a este equipo durante su historia es su lucha y su resurgir contra todo pronóstico. "Nunca dejes de creer", dice el lema colchonero... lema que no se puede olvidar por este tropiezo.
Simeone ha tachado de "fracaso" lo ocurrido en Milán. Perder dos finales y de la manera que lo ha hecho no es planto de buen gusto para nadie, pero es hora de hacer balance y quedarse con lo positivo.
Los colchoneros han firmado una temporada casi perfecta. Hace cinco años, nadie imaginaba ver al Atlético en dos finales de la Champions... y lo ha hecho.
Es cierto que la suerte, el destino o el azar no han querido que los colchoneros levanten el título todavía, pero ese no es motivo para bajar los brazos y olvidar todo el trabajo que se ha hecho por el camino.
Simeone cogió un equipo sin confianza y lo devolvió a lo más alto del fútbol. Se llevó la Europa League, la Supercopa de Europa, la Copa del Rey y la Liga. Se le resiste la Champions.
Y qué decir de esta temporada... el Atlético ha peleado por la Liga hasta las últimas jornadas y se ha convertido en el equipo revelación de la Liga de Campeones, dejando fuera a dos grandes como el Barça y el Bayern.
El golpe ha sido duro, sí... pero el legado de Simeone en el Atlético le avala. La afición confía ciegamente en su técnico... ahora la pelota está en el tejado del Cholo.