Jovic sigue por debajo del radar. El delantero del Real Madrid milita cedido en el Eintracht y lo hizo lo suficientemente bien como para llamar la atención del seleccionador de su combinado nacional, Serbia, pero sus compromisos internacionales no sirvieron para que volviera a ver puerta o se vistiera de protagonista.
Los suyos se vieron las caras con Irlanda, Portugal y Azerbaiyán y él partió desde el banquillo en las tres citas. Ingresó para los minutos finales, conque no tuvo tiempo de lucirse ni tampoco de ganarse la titularidad, que recayó en Mitrovic y Vlahovic, principalmente.
Esta situación acrecenta las dudas alrededor del punta, que no marca un gol desde el 23 de enero, cuando le endosó uno al Arminia Bielefield, uno de los conjuntos más débiles a priori de la Bundesliga. Para hacerlas desaparecer, tendrá que ponerse el mono de trabajo en Alemania.
En el lado positivo, le queda aún mucha parte de la temporada por delante. Hay que recordar que, en sus primeros partidos tras regresar al Eintracht, llamó mucho la atención por su buen hacer. Solo falta que vuelva a encontrar la manera de poner sobre la mesa esa calidad.