Juan Ignacio Martínez, entrenador del Zaragoza, quiso hablar en declaraciones a 'Marca' de su primera etapa al frente del banquillo aragonés. Desde su llegada, ha sumado siete puntos de nueve posible y ha levantado la moral de su plantilla.
Y es que al llegar la situación del equipo era complicada: "En el primer momento que Miguel me llama para fichar, ya no es que me quitase el sueño, es que no dormía. Apenas tres horas. Era mucho trabajo por hacer y yo soy una persona que estoy constantemente buscando la excelencia, y no la alcanzo nunca. Soy muy exigente conmigo mismo. Le dedico muchísimo tiempo a esto".
"Estábamos en una situación caótica y había que remontar el vuelo. Hemos dado un pasito, pero seguimos abajo. Todavía queda mucho camino por recorrer. Ahora descanso ya seis o siete horas. También es que venía de zona de confort, de no trabajar, pero el fútbol profesional es así. Creo que a cualquier colega de profesión le pasa lo mismo", añadió.
Sobre lo que aporta Zapater al equipo, declaró: "Es un líder. Siempre está aportando cosas, juegue o no. Es de gran ayuda para un entrenador. Es parte de la historia y del escudo del Zaragoza".
Además, Juan Ignacio Martínez dejó clara su postura de cara a las posibles salidas que puedan darse en el mercado invernal: "Egoístamente, no me gustaría que se marchara ningún futbolista importante y vamos a cruzar los dedos para que no suceda".